lunes, 5 de marzo de 2018

SIGNOS DE LOS TIEMPOS




-        ¿Con qué estás jugando?
-     Me lo dio un niño.” (aquí lo primero es salvarse las espaldas).
-        No te he preguntado quién te lo dio. Te he preguntado con qué estás jugando.
-        Me lo dio un niño en el patio
-        Que me digas qué es
-        Es una mujer cabra voladora.
-  ¡Pero qué dices! ¡Cómo va a ser una mujer cabra… ¿¿¿voladora???! ¡Anda! Trae pacá eso…


Se puede decir más alto pero no más claro. Es más. Creo que se ha quedado corta.


Echo de menos cuando los miembros del género masculino te rondaban regalándote una navaja multiusos o una cinta métrica. O un tubo de silicona bicomponente. Eran tiempos más sencillos, y sus signos, fáciles de interpretar (:“no me inspiras flores ni cajas de bombones, aunque es posible que te aprecie de algún modo”). 
Una mujer cabra voladora… francamente, se me escapa.
Definitivamente los tiempos cambian.



Hija mía: nunca volveré a dudar de tu palabra. Ni aunque me digas que estás jugando con un cefalópodo superdotado de fuego interdimensional.



jueves, 1 de marzo de 2018

EL CICLO DEL AGUA





-        ¡Mira hermana! ¡Se está formando el ciclo del agua en tu botella!




Así me gusta, hijas mías. Conocimiento aplicado, que lo llaman.




Aquí la otra cara de la botella, que ya sé que sois muy curiosos. Si, es temporada de Gorjuss. Indefinidamente, me temo.